23/10/08

EXPLICACIONES Y PUNTO FINAL AL ALTER-ARTE

23.10.2008 . NELO VILAR. LA TRIBUNA DE 'LA VERDAD'

Cuando por fin acabó tanto el festival Alter-Arte como su contestación, y en tanto que vapuleado ex director del mismo, dimitido a raíz de la censura impuesta al artista Leo Bassi, me propongo desmentir falsedades arrojadas tanto sobre mi gestión como sobre mi persona, y exponer algunas reflexiones al respecto.

En primer lugar hay que decir que la decisión de censurar a un artista es, sencillamente, vil. Una cacicada. Las razones dadas por la Consejería (el desconocimiento del trabajo de Bassi) no se sostienen. Las consecuencias de tal decisión fueron la dimisión del equipo de dirección del festival (Carolina Boluda, Ángela García y yo mismo) y la del 70% de las actividades programadas, entre las cuales había artistas de prestigio internacional. Con una decisión tan torpe y extrema se ha perjudicado a todo el mundo: a artistas, programadores, a la población de Murcia La propia Administración ha resultado malparada, por el descrédito que le supone. No digamos el currículo del consejero responsable, Pedro Alberto Cruz, que en adelante arrastrará este estigma en su carrera como liberal y teórico del arte.

Para justificar tal acción la estrategia ha sido atacarme a mí, como responsable, excusando la censura. Se llegó a decir que me había enriquecido y conseguido fama con mi dimisión. Hay que ser un miserable para decir tal cosa. Mis honorarios completos (que obviamente no he cobrado en su integridad) ascendían a 12.000 euros brutos, que, restando impuestos (como autónomo), se quedaban en unos 9.000. Contando que empecé a trabajar en enero, mi economía este año sigue siendo precaria, y un año más no soy ni mileurista. Por otra parte, poco partido puedo sacarle a la fama, puesto que no vivo del arte ni de la gestión: desde hace catorce años me dedico profesionalmente a la recolección de la clementina en las comarcas del sur de Castellón, es decir, soy un peón agrícola durante 4 meses al año para poder mantener la independencia de mi trabajo. Ni puedo ni quiero sacar tajada.

El libelo venía de cierto personajillo siniestro, también convenientemente estigmatizado a raíz de esto, que cobra unos 4.000 euros al mes, que disfruta de un cargo para el que no tiene méritos conocidos y cuyo único criterio de programación es seleccionar espectáculos cool (es decir, guáis).

Pero si estas razones no cuajaron, sí parece haber tenido más éxito el disparate de decir que todo nuestro trabajo estaba enfocado para reventar Alter-Arte. Para nosotros los objetivos estaban muy claros: el festival debía hacerse, y se hubiera hecho si no se hubiera censurado a Leo Bassi a tres semanas del festival. Y hubiéramos seguido tan amigos, y probablemente hubiera seguido dirigiendo Alter-Arte, y etc. El programa original puede consultarse en www.seofrecefestival.org, y en él se pueden reconocer nuestros objetivos: potenciar el aspecto emergente; estimular la producción local; favorecer la confrontación crítica; ofrecer espacios de formación; proporcionar infraestructuras; discutir sobre el propio modelo de festival... Y la intención de que el catálogo fuese un espacio para las ideas. Esto merecía hacerse. Debía hacerse.

El modelo propuesto respondía al encargo del consejero de programar un festival alternativo. Hasta el último momento se me reconoció el trabajo y su interés. El contenido del festival se conocía desde marzo y periódicamente se iban aportando informes, textos e imágenes de las actividades. Que se quisiera alternativo o incluso político, como dijo el consejero en la rueda de prensa de abril, suponía, a mi parecer, poner en solfa la sobre-institucionalización del arte, su instrumentalización por parte del poder político, la paradoja y la perversión inherentes al hecho de que se subvencione la subversión Ése ha sido mi trabajo durante años, de manera que no ha sido una sorpresa. El reto, la maniobra, era cumplir estos objetivos desde un espacio subvencionado, lo cual suponía un lance interesante que debería haberse podido llevar a cabo: pero no reventando el festival sino ejecutándolo. También he de decir que la programación hubiera sido la misma bajo una administración socialista o de cualquier otro partido.

Se ha llegado a decir que si el festival no caía con Leo Bassi (del que tenían noticia ¿desde marzo!) tenía otras acciones preparadas: la paradoja es que las otras acciones ¿se han realizado! Y en cuanto a que pretendía recurrir a la «destrucción del mobiliario urbano», jamás ha pasado por mi cabeza hacer tal cosa, son más bien delirios y manipulaciones de ciertos columnistas. Meatintas que hacen su trabajo con mentiras y medias verdades. La misma manipulación que ha hecho decir que soy un «activista callejero» (¿?) y obviar mi doctorado y mi experiencia en la gestión independiente y la teoría del arte. Por ejemplo, yo no llamaría «hijo de puta» a nadie, como ha dicho algún miserable.

Dentro de su dramatismo, la situación ha tenido algunas consecuencias positivas. Uno de los objetivos compartidos (teóricamente) con el consejero ha sido siempre el de visibilizar conflictos. Pues bien, éste ha sido un objetivo cumplido absolutamente. Se han visibilizado los conflictos del arte con el poder y los límites de su presunto liberalismo. Para los artistas dimitidos, la experiencia de la solidaridad y el asociacionismo ha sido apasionante y continuará dando frutos, y en el aspecto artístico la situación eleva el listón de las exigencias ético-estéticas, un tándem que ha de ir de la mano. Aún en el capítulo de los conflictos, hemos visto que artistas presuntamente políticos, de discurso social, sin una reflexión sobre su independencia no son más que mezquinos mamporreros, trepas rastreros en busca de subvenciones y prebendas. De artistas comprometidos a artistas del régimen. El aprendizaje ha sido enorme para todos.

Nelo Vilar es exdirector de Alter-Arte.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Felicidades, Nelo. No te conozco personalmente, pero eres un ejemplo de valentía, integridad y coherencia. Ánimo y mucha suerte en el futuro.

Anónimo dijo...

Nelo, Carolina, y Angela (a ti no te conozco) mis respetos y admiración.